4 de febrero de 2008

Sobre luces y flores

Encontre una flor en el camino, la observé y noté que su tallo estaba quebrado por debajo de las hojas. Quise salvarla pero no había forma. En la desesperación, accidentalmente corté su tallo, quedanodo la flor en mi mano derecha y el tallo en la izquierda.


Por un instante me sentí mal por mi torpeza, pero luego descubrí que la flor estaba aún mas bella que antes. Como siquisiera agradecerme por haberla librado de su sufrimiento, sus pétalos irradiaban color y el aroma que desprendía era de lo mas exquisito que mi olfato llegó a probar.


Me sentí feliz por ese regalo que el mundo me ofrecía. Con la flor en mi mano, crucé la calle y me dirigía a casa, cuando divisé a una anciana que venía caminando por la misma vereda en sentido contrario al mío. Su arrugado rostro mostraba un gesto de preocupación


Sin decir ni una palabra, la miré y le entregué la flor. Ella me obsequió una gran sonrisa que iluminó el resto de mi día.

Desconozco si afuera hay sol, pero dentro mío hoy solo hay luz.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

...Yooooooo tengo una flor, la tengo que regar, y cuando sea grande la tengo que fumaaaaaar...
Recuerdo esa canción y comprendo claramente la alegría de la anciana.
Bares y besos.

LG

Emiliano dijo...

Luz, luz y más luz!!!! Al final el gran Victor la siguió... lindo relato.