El mercado capitalista dice que el valor de los productos se mide por la ley de la oferta y la demanda. Tan simple como decir que para acceder a un bien debemos conseguirlo entre otros tantos de personas que buscan lo mismo que yo.
Entonces podemos deducir que un bien es escaso cuando no todos pueden acceder a él.
La felicidad sería entonces un bien escaso. Todos tratamos de poseerlo, pero pocos lo tienen completamente.
Quizás debemos dejar de pensar que se puede poseerla. Simplemente disfrutar de su paso por nuestros días en cada pequeña cosa: una caricia en el cuello, las hilachas de queso colgando de una porción de pizza, los besos del perro, los ojos que sonríen al mirarte cada día.
Quizás la felicidad no sea un bien escaso. Lo que escasea es la capacidad de verla...
1 comentario:
tu presencia en la vida y tu compañía me hace feliz... proyectar un futuro hermoso y crearlo en el presente, es maravilloso. Te amoooo! Sigamos adelante! Y estemos atentos para que la felicidad nos acompañe siempre!!
Publicar un comentario